Amo las tardes de otoño, las novelas chispeantes y dulces, además de la buena compañía, en especial si viene con música. Si quisiera puedo agregar que vivo en la imaginación, esa tierra remota, cercana, y curiosa, en donde no me logro explicar por que intentamos, inconscientemente, de regirla por las leyes que conocemos. Vivimos en donde, gratamente y gracias a Dios, podemos utilizar el recurso de la mente para crear durante un efímero momento, una lucesita en nuestro camino, que nos hace soñar, y creer que tiene sentido lo que hacemos. Sin la imaginación, seriamos entes uniformes, iguales, extraños para todos, hasta para nosotros mismos. Yo prefiero la fantasía, la ilusión, el arte, la humanidad. Por eso adoro las tardes de otoño... son ideales para dejar volar la imaginación a una tierra desconocida, embarcada en un buen libro y la compañía perfecta de nuestras melodías favoritas.
"La imaginación es más importante que el conocimiento." -Albert Einstein
No hay comentarios:
Publicar un comentario